Pese a que insistamos mucho en ello, siempre vemos cómo bastantes jugadores confían más en su intuición que en la fortuna. Y es que el razonamiento de los seres humanos no siempre sigue una base lógica. En incontables ocasiones, los jugadores de casinos están tan convencidos de la validez y sensatez de su raciocinio que acaban por cometer innumerables errores. A este fenómeno se le denomina la falacia del jugador . Un tipo de reflexión totalmente equivocada relacionada con los juegos de azar. La falacia del jugador es uno de los principales motivos por los que los jugadores de casinos físicos y casinos en vivo pueden perder grandes cantidades de dinero apostando. En este artículo, dado que nuestras decisiones influyen de forma trascendental en los juegos de azar, vamos a mostraros en qué consiste y cómo puede afectarnos la falacia del jugador.
¿Qué es la falacia del jugador?
El concepto de falacia comprende una parte de la ciencia filosófica que estudia la lógica, una disciplina que se remonta a los tiempos de Aristóteles. Para que nuestros lectores comprendan fácilmente de qué estamos hablando, decir que: una falacia es un pensamiento, un razonamiento o una tesis que puede parecer correcto, pero no lo es . Hay dos tipos principales de falacias: las intencionadas, cuyo objetivo puede ser manipular a otras personas; y las inconscientes, errores que cometemos de forma involuntaria por ignorancia o falta de un razonamiento lógico. Entonces, ¿a qué se refiere el concepto de falacia del jugador? Cuando hablamos de la falacia del jugador, nos referimos cuando estos piensan que pueden predecir un resultado, pese a saber que en los juegos de azar el desenlace es totalmente aleatorio .
Para comprender mejor os vamos a poner un ejemplo. Pongamos que estamos jugando a los datos, y la apuesta consiste en sacar un 6 en un máximo de 5 tiradas. Si llegamos a las 5 tiradas sin sacar el 6, perdemos. Pues bien, tras tirar los dados las 4 primeras veces, todavía no hemos obtenido el resultado que necesitamos. Sin embargo, tenemos dos opciones: retirarnos para no perder la apuesta, o bien tirar por última vez a ver si sale el dichoso 6. En este punto, nuestro pensamiento lógico nos dice que hay muchas más probabilidades ahora de obtener un 6, ya que todas las anteriores tiradas no salió. Como consecuencia, proseguiremos con la partida. No obstante, cada lanzamiento de dados es independiente del resto. La probabilidad de que salga el 6 sigue siendo la misma que la primera vez que tiramos los dados. Por lo tanto, seguimos corriendo el mismo riesgo de perder toda la apuesta.
La esencia de los juegos de azar
¿Cuántas veces hemos hablado de esto? Los juegos de azar se denominan así porque son justamente eso, juegos que se basan en la suerte o en la fortuna que un jugador pueda tener. Tanto en casinos terrestres como en los físicos, el azar está omnipresente. Las máquinas tragaperras, los juegos de cartas, los dados, las apuestas deportivas, etc., ¡todas las disciplinas o modalidades se basan en la aleatoriedad! Todos los operadores están obligados a tener en sus juegos un generador de números aleatorios.
Pese a lo que acabamos de explicar, la mayoría de los jugadores acaban por caer en el fenómeno de la falacia del jugador. ¿Por qué? La respuesta la encontramos en cómo funciona nuestro cerebro. La mente humana trata siempre de ordenar las cosas que suceden a su alrededor en una secuencia lógica gobernada por causas predecibles. Esto también lo aplica a los juegos de azar, pese a que es consciente de que el resultado depende de la suerte.
La falacia del jugador en los juegos de casino
Como apuntamos en la parte superior de este escrito, la falacia del jugador se refiere a cuando pensamos que un evento aleatorio pasado puede influir en el resultado de uno futuro. Es decir, que sabiendo los resultados anteriores creemos que sabemos cuál será el siguiente. No obstante, existen otros razonamientos fallidos dentro de la falacia del jugador que también se comenten muy a menudo en los casinos tradicionales y en los casinos en vivo. Estas son las más comunes:
1. Cuanto el mismo resultado se repite continuamente: ahora hablaremos de un error que comenten los jugadores muy a menudo, pero cuyo fenómeno es justo el contrario. Pongamos también en esta situación el juego de los dados. Pues bien, en este caso el apostador piensa que, como el número 6 ha salido muchas veces, en la próxima tirada es poco probable que se vuelva a repetir el mismo resultado. ¡El número que salga en los dados depende del azar, no de las tiradas anteriores!
2. Un resultado tiene pocas probabilidades de ocurrir si se dio recientemente: el mejor método para entender este raciocinio es poner como ejemplo las loterías. En este caso, si el número premiado en el sorteo anterior fue el 12299, este no volverá a salir de nuevo. Al menos durante bastante tiempo. Por lo tanto, escogeremos otro número distinto. Sin embargo, lo cierto es que sigue habiendo las mismas posibilidades de que el 12299 vuelva a ser el número premiado. De nuevo, estamos frente a una falacia del jugador que puede hacernos perder mucho dinero.
3. Un resultado tiene más probabilidades de salir si nunca ocurrió: por último, esta tesis errónea es justo la contraria a la anterior. Para este último caso pongamos como ejemplo uno de los juegos más populares de los casinos en vivo : la ruleta. Si en la última tirada la bola cayó en el color rojo, ahora es más probable que caiga en el negro.
¿Cómo puede afectar la falacia del jugador?
Tras analizar lo que llevamos expuesto hasta ahora, muchos pensaréis, ¿cómo una persona puede caer en este tipo de engaños? Lo cierto es que da que pensar cómo los jugadores -incluso, expertos- acaban por ser víctimas de esta falacia. Y es que estos pensamientos nos superan, no podemos controlarlos. Nuestra mente, por su propia naturaleza y forma de actuar, provoca que lo hagamos de manera inconsciente. De hecho, solemos sobrestimar nuestra capacidad para calcular un evento aleatorio . Estas ideas erróneas son uno de los principales desencadenantes para que las personas pierdan sus apuestas. Para que veáis cómo la falacia del jugador puede influir en los juegos de azar, a continuación veremos un ejemplo clásico de este fenómeno.
Viajemos al célebre casino de Montecarlo a las puertas de la Primera Guerra Mundial. La noche del 18 de agosto de 1913 en el mítico casino de Mónaco ocurrió un evento realmente extraordinario. En el juego de la ruleta la bola cayó 26 veces de manera consecutiva en la casilla de color negro . Como podéis imaginar, al ver la situación, la mayoría de los allí presentes comenzaron a apostar grandes cantidades de dinero a la casilla roja. Concretamente, desde la décima partida. Obviamente, esperaban que tras caer tantas veces en el negro, la bola cayera en el rojo. A simple vista, parece un razonamiento bastante lógico. Sin embargo, nada cambio. La bola siguió cayendo en el color negro hasta la partida número 26. Los jugadores perdieron grandes sumas de dinero, mientras que el casino tuvo grandes beneficios. He aquí un ejemplo de los riesgos que acarrea seguir una lógica falaz .
Siempre que apostemos a los juegos de casinos terrestres o casinos en vivo debemos tener presente que tan solo la fortuna, el azar, es lo que determinará el resultado. Ningún juego de azar es predecible. La falacia del jugador es un error muy común en los juegos de casino. Su análisis nos puede servir cómo lección. Para tratar de evitar errores que nos pueden hacer perder mucho dinero.